En nuestro último viaje a Milán nos propusimos generar los menos residuos posibles durante nuestra estancia. Es algo que llevo haciendo desde hace un tiempo en cada viaje que hago, y aunque eso implique viajar con más cosas de las que me gustaría en la mochila, al final la satisfacción de saber que he puesto mi pequeño granito de arena en intentar que el planeta tenga un poco menos de basura, hace que no me importe ir tan cargada :)
A continuación, os comparto nuestras diez ideas para viajar de forma más responsable:
1. Utilizar transportes que emitan las menos emisiones posibles, como la bici o el tren antes que el avión, coche o autobús. Los combustibles fósiles que utilizan los medios de transporte, como por ejemplo el avión (uno de los transportes más contaminantes), emiten grandes cantidades de dióxido de carbono a la atmósfera. Si por cualquier circunstancia te es imposible no coger un avión, puedes hacerte responsable de tu huella de carbono calculando la cantidad en páginas como www.carbonfootprint.com, y donar el dinero equivalente al CO2 de tu viaje.
2. Planifica tu viaje antes de ir, sobre todo si te vas pocos días y quieres optimizar el tiempo y ver lo máximo posible.
¿No os ha pasado alguna vez que habéis terminando con mil planos de ciudades en la mochila, que apenas habéis utilizado? Para evitar tener que ir a una oficina de turismo a pedir información, pide prestado alguna guía a un familiar o amigo que haya viajado a ese sitio. También puedes buscar una en formato pdf, para consultar desde el móvil.
3. No imprimas tus billetes y reservas, llévalas guardadas en el móvil o en el correo electrónico. Existen aplicaciones, como PassBook o Pass Wallet, para poder guardar todas las reservas en formato electrónico. Si no vas a tener internet y tienes que imprimir algo importante, utiliza papel reciclado o reutiliza una hoja que ya tengas usada.
4. Lleva tu botella de agua + filtro de carbón. En muchos países, el agua del grifo se puede beber (infórmate antes de ir), ahorrándote dinero y plásticos de un sólo uso. En el caso de que quieras limpiar el agua del grifo antes de beberla, existen filtros de carbón o Binchotan, que mineraliza, equilibra el pH, reduce el cloro y elimina el mal sabor. Lo mismo ocurre con los cubiertos y las servilletas. Llevar tus propios cubiertos de metal/madera y una pequeña servilleta en la mochila, ahorran que tengas que utilizar aquellos de un sólo uso. En muchos establecimientos están implantando cubiertos de un sólo uso de madera, pero ¿No es mejor que al terminar de comer no haya nada que tirar al contenedor de reciclaje? También es preferible sentarse a comer en un restaurante, pero si tienes prisa o comiendo mientras caminas, las sandwicheras son muy útiles si compras comida para llevar o algún dulcecito/snack.
5. Haz Freetours. Está bien, lo reconozco, hacer un freetour no va a ayudarte a generar menos residuos, pero te permite conocer las cosas más importantes de la ciudad, su historia y te pueden recomendar sitios donde comer/salir/ beber más barato y degustar el producto local (olvídate por unos días de las grandes cadenas de restaurantes que hay en casi todas las ciudades). Tu pones el precio al trabajo del guía, pasas un buen rato y puedes conocer gente nueva de la que aprender cosas muy interesantes.
6. Llevar productos en formato sólido. Si no facturas maleta, al pasar el control siempre hay que llevar los líquidos (champú, gel, crema, desmaquillante, desodorante, etc.) en una bolsa plástica y sacarlos fuera de la maleta. Si llevas todas esas cosas en formato sólido, no es necesario sacarlo y podrás pasar el control con más rapidez. Además, puedes meter varios de los productos juntos en cajas metálicas, ocupando menos espacio en la maleta que todos esos pequeños botes.
7. No pidas bolsa. Si haces alguna compra pequeña durante tu viaje, si puedes, mételo en algún bolsillo de la mochila. Otra opción es llevar en la mochila una totebag o bolsa de tela para fruta, doblada en la mochila y sacarla cuando la necesites.
8. Explora la ciudad a pie o en transporte público. En las ciudades que visites intenta andar lo máximo posible, conocerás muchos rincones y calles especiales, además de hacer muchísimo ejercicio. Si algo está lejos, puedes coger transporte público. Existen muchos consejos en internet para saber qué billetes existen para el transporte en cada ciudad, y así ahorrar dinero y evitar contaminar.
9. Muchas veces, si viajas low-cost, el desayuno no está incluido, y toca buscar alguna cafetería para desayunar. Si pides un café para llevar, normalmente suelen ponértelo en un vasito de cartón con tapa de plástico.
El problema de estos vasitos, a pesar de ser de papel, es que contienen una fina capa plástica para evitar que el contenido se derrame, además de tener una vida útil de menos de media hora.
Para evitar esto, existen termos o tazas reutilizables. En muchos países europeos no es raro pedir que te pongan el café en tu propio termo, y a veces te hacen descuento por ello.
10. Muchas veces no podemos controlar que nos pongan una pajita, nos den una servilleta o un cubierto de plástico que no deseamos. Si ocurre esto, RECICLA. Si solo hay una papelera cercana sin distinción de residuos y no hay un contenedor cercano en el que poder tirar cada cosa en su sitio, guarda tu basura hasta que encuentres uno donde poder tirarla.
Espero que os hayan gustado estas pequeñas ideas de cómo viajar generando menos residuos y de forma más responsable. ¿Cuáles de ellos hacéis durante vuestros viajes? ¿Conocéis algún otro truco para evitar generar basura? ¡Me encantaría saberlo!
Muchas gracias por concederme este ratito.
¡Nos vemos!
Patrice :)
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